Si quieres una explicación técnica, un logo es la representación visual de tu marca en el mercado.
Si quieres la realidad, tu logo es la cara que verán de tu empresa los clientes que quieres enamorar, la competencia a la que quieres superar, y las personas que te ayudarán a hacerlo.
Todas las empresas marcan. Unas marcan la diferencia y otras la indiferencia.
Tener un logo y un kit de marca es el primer paso para hacer que tu empresa marque la diferencia. Un kit de marca es (aunque muchos profesionales lo definen según el día) el conjunto de elementos, adaptaciones de logo y aplicaciones corporativas que formarán la estética de tu marca. Por ejemplo, tus tarjetas de visita, tu firma de correo o tus publicaciones en redes sociales.
Quizá esto no sea para ti, pero tener un logo profesional diseñado a medida, acompañado de un desarrollo visual de marca que impacte a tus clientes, es lo que dará luz, forma y voz a tu empresa para que marque la diferencia.
Hasta el día de hoy me he encontrado con dos tipos de emprendedores, los que apuestan por su idea y necesitan un logo que la lleve a lo más alto; y de los que no me acuerdo ni yo, ni tú, ni nadie, porque no empezaron el camino.